Estimados amigos, los espero mañana sábado 23 de octubre, a las 7 p. m., en la entrevista que me hará favor de realizar PIARA KAUR vía su canal de You Tube «El diario de una semilla cósmica», en su serie «La era de la transformación», así como en su página de FB.
Es un honor y un gusto participar con ella en este intercambio de ideas e información acerca de nuestros compañeros de vida.
Hablaremos acerca de nuestros amados compañeros animales y la importancia que ellos tienen en nuestra vida; cómo comunicarnos con ellos de corazón a corazón, cómo atenderlos desde una perspectiva integral y holística, atendiendo a sus necesidades emocionales y espirituales.
Favor de compartir entre los contactos que crean interesados en este tema.
Les dejo AQUÍ la charla completa que tuvimos anoche acerca de muerte y eutanasia en animales.
📣📣 ¡En vivo! ¡En directo! 📣📣
📆Hoy 21 oct., ⏰9 pm, CDMX.
Charla de café en el ☕Catcafé de @31 gatitos, junto con los vets de @holinutvet.
Estaremos hablando de MUERTE Y EUTANASIA, desde diversos puntos de vista: holístico, veterinario, y del guardián felino. No se pierdan el Directo por Instagram a través de @31 gatitos, y en FB en mi página @azulindigo6.
Será una plática muy interesante porque abordaremos los distintos puntos de vista, desde la opinión y diagnóstico veterinario, las sugerencias naturales y holísticas, la perspectiva del guardián del animal, y… ¡la opinión del animal mismo!
Saber qué decide tu animal con respecto a su propia vida, salud y muerte puede ser enriquecedor, sorprendente, incluso sí, difícil de aceptar por nuestra parte humana, pero siempre se podrá llegar a un punto de acuerdo entre todos los involucrados en un caso de salud animal, SIEMPRE en beneficio del animal mismo.
No te pierdas esta charla de hoy y queda atento para los avisos en estos días de otras actividades durante octubre, relacionadas con honrar a nuestros compañeros animales.
Giotto, San Francisco de Asís predicando ante las aves, ca. 1290-1300. Fresco ubicado en la Basílica de San Francisco, en Asís, Perugia, Italia.
En días pasados se conmemoró el día mundial de los animales. Como puse en un post en mis redes, al menos en México (y la verdad es que en el mundo) no hay mucho que celebrar y sí mucho para reflexionar.
Reflexionar acerca de nuestra postura como especie (humana) frente a la responsabilidad que tenemos con nuestros compañeros de mundo: los animales.
San Francisco es el santo patrono de los animales debido a varias virtudes: su modestia, practicó una vida modesta y sencilla, y sobre todo, su gran compasión y afecto por los que llamaba «hermanos»: los animales.
¿Qué tanto a nivel especies, a nivel sociedad y a nivel personal o individual estamos haciendo por ellos? Nos preocupan mucho. Nos preocupa el destino del planeta, el avance del cambio climático, los grandes desastres naturales en todo el planeta… ¿Y qué hacemos al respecto? Como diría Maussán: ¡Nadieeee haceee nadaaaaa!
Pequeños cambios hacen la diferencia y debemos tomar acción hoy si es que queremos en algún momento «celebrar» el día mundial de los animales. Dejo aquí algunas ideas pero si tú tienes más, otras opciones, sugerencias, déjalas abajo en los comentarios.
Comer menos carne y más plantas, frutas y vegetales, al menos un día a la semana.
Ayudar de algún modo a animales en situación de calle, alimentándolos, rescatando, esterilizando y brindándoles un hogar o buscar su adopción responsable.
Generar en la familia la cultura del ahorro.
Aprender y llevar a cabo reciclaje de todo lo que sea posible dentro de casa.
Charla de café en el ☕Catcafé de 31 gatitos. Estaremos hablando de comunicación con animales, adaptación de gatos al hogar, duelo por la pérdida de compañeros gatos, ¡y más!
A diario se leen reportes o noticias de gente que se queja de sus gatos porque “arañan”, “desgarran”, “maúllan”, “muerden”, “orinan”, “defecan”, “se esconden”, «se trepan», “tiran cosas”, “se desvelan”, “corretean solos”, “amasan”, «se come las plantas», «sueltan pelo», «vomitan raro», entre otras cosas, y esta gente no solo se queja, sino que regaña y castiga a sus gatos por hacer… ¡cosas de gatos!
Sí, todo lo mencionado son cosas que los gatos hacen: arañar, desgarrar, maullar, morder, orinar, esconderse, tirar o empujar cosas, escalar, trepar, amasar. Es absolutamente normal que los gatos hagan esto. ¿Por qué la gente se queja entonces? Básicamente por ignorancia, y porque hacen estas cosas en las “propiedades” de estas personas: sillones, cortinas, cables, tapetes, repisas, encimeras, baños, cocinas, ropa, etc. Y lo que le hace falta saber a estas personas es que los gatos necesitansus propias cosas para hacer todo esto que es propio de su especie.
Para este asunto: arañar y desgarrar los gatos necesitan:
Rascadores (varios, varios, no uno), tanto de piso (horizontales), como de poste, de árbol, inclinados, ondulados.
Para este asunto: morder, rasguñar, tirar cosas, corretear, los gatos necesitan:
Juguetes varios de distintas formas para que los humanos descubran cuál le gusta más, si los que ruedan, los que vuelan, los que zigzaguean, los de luces, los que rebotan, los que crepitan o truenan (pelotas, papelitos, cañas de pescar, ratoncitos, láseres, tapitas, cordones, bolsitas de celofán hacen ruido).
Para este asunto: orinar o defecar fuera del lugar indicado, los gatos necesitan:
Areneros (varios, no solo uno) de distintos diseños (altos, bajos, cubiertos), hasta descubrir su favorito, colocados en sitios estratégicos, y un sustrato (arena) idóneo para sus gustos y necesidades, por ejemplo, si es de pelo corto o largo, etc.
Para este asunto: trepar, escalar, tirar cosas, los gatos necesitan:
Gatificación de su entorno en espacios altos: repisas de distintas formas: rectas, onduladas, curvas, con o si forro, puentes, cubos.
Para este asunto: esconderse, ser huidizo, amasar, los gatos necesitan:
Camas apropiadas para él, mullidas, suaves, túneles, espacios tipo cueva para ellos, lugares aptos para que se puedan esconder, arrullarse y dormir sin ser molestados.
Para este asunto: comerse las plantas, soltar pelo y vomitar los gatos necesitan:
Tener su propio jardín gatuno, que no es más que una maceta con un pasto especial para ellos, que por instinto comen hierba para algunos procesos intestinales, y desechar bolas de pelo que acumulan al acicalarse. Es muy fácil de hacerlo y así evitar que se coma flores y plantas de la casa. Además, cabe tener mucha precaución al tener plantas y verificar que no sean tóxicas para ellos. Tener su propio cepillo y tener sesiones de cepillado al menos dos a tres veces por semana para ayudarle a deshacerse del pelito muerto y mantener un pelaje hermoso. Con esto también podemos prevenir vómitos con bolas de pelo.
*Para todo esto no necesitan comprarse cosas caras, mucho de esto es muy fácil de hacer en casa, con materiales reciclados. Hay que informarse, investigar.
Desafortunadamente la gente se hace de un gato (rescatado, adoptado o, en el peor de los casos, comprado) sin tener la menor idea de cómo es, cuáles son sus características, los detalles de su especie, sus necesidades, cuidados, y un largo etcétera.
Estas personas se quedan con la idea de que como ya tuvieron un perro antes, pues será más fácil tener un gato, que imaginan que es un perro, pero chiquito. Y al no tener la respuesta que esperan, se les hace muy fácil devolver al gato al refugio donde lo adoptaron (en el mejor de los casos, aunque esto ya es terrible) o en el peor de los casos, lo botan a la calle dejándolo a su suerte.
Para conocer estos aspectos y muchos más, Azul Índigo. Terapias alternativas para animales… y sus humanos ofrece el servicio de consultoría felina, que tiene como objetivo precisamente informar acerca de todos estos detalles que las personas deben saber antes de llevar a casa un gato y orientarlas para que no los traten como pequeños perros.
La situación de los animales en situación de calle en México es alarmante. Tenemos el deshonroso primer lugar en Latinoamérica en abandono y maltrato animal. Es insólito que a estas alturas del milenio aún no se tenga conciencia animal, quiero decir, conciencia acerca del bienestar animal.
Poco avanzamos con las leyes de protección animal en México. Si la ley para los humanos difícilmente se aplica, menos aún la ley animal y la protección de sus derechos.Mucho se agradece al señor Monreal proponer la tipificación del abandono animal con el Código Penal, así como sus esfuerzos por “elevar a rango constitucional la protección, preservación y conservación de las especies animales no humanas, que forman parte del territorio nacional”. Ojalá que esto tome forma, y sobre todo, se respete y cumpla.
A diario escucho historias de gente que ve maltrato animal flagrante y no se hace nada, y no quiere decir que los espectadores no quieran o no sepan denunciar (que muchas veces sí), sino también nos encontramos con la pereza de entrar en una espiral burocrática interminable por querer hacer un buen acto en favor de los animales.
Gente que tiene animales en malas condiciones debe ser denunciada y puesta a disposición de las autoridades correspondientes. ¿La respuesta que ya oigo?: “¡Pero si la justicia para ellos no existe! ¡Es inútil, nadie hace caso! ¡Las autoridades nunca llegan!”, mucho más… y todo cierto. La justicia en favor de los animales y la protección de sus derechos no se hace escuchar en México.
De tal forma que esto resulta en dos tristes panoramas:
Gente inconsciente, ignorante y perversa que tiene animales en su casa en las peores condiciones de maltrato animal.
Como consecuencia de lo anterior y también debido a otros motivos, el número de animales abandonados y que acaban en situación de calle es altísimo. Tan alto que es imposible de acabar con él, o al menos de disminuirlo.
Las cifras duras no existen, son estimados: 70 por ciento de los perros, es decir, 18 millones de perros, viven en situación de calles. Esta cifra aumenta 20 por ciento anual.
¿Y los gatos? Quizá bastante más, yo diría que mínimo el doble, porque debido a las características de la especie, son mucho más difíciles le contar: son nocturnos, huidizos, en difícil tocarlos o atraparlos, etc.
Los esfuerzos más heroicos para combatir este asunto lo hacen los albergues y protectores independientes del país; los mayores concentrados en la Ciudad de México, por obvias razones, pero en todos los estados de la República hay héroes. Estos albergues y protectores NO CUENTAN con ningún apoyo gubernamental. Funcionan y sobreviven gracias al buen corazón y compasión de personas en favor de esta causa.
Hay dos grandes opciones que pueden ayudar a reducir un poco estos números, si todos ayudamos:
La esterilización de perros y gatos, tanto los que están en situación de calle (realizando campañas masivas y a bajo costo), como los animales que viven en casa. Si puedes colaborar esterilizando animales de la calle, tú por tu lado, hazlo, no lo dudes, no importa que después lo reintegres a su comunidad.
Adoptar y NO comprar. No hay razón, motivo, circunstancia o excusa, para comprar un animal —gato o perro— de criadero (o disque criaderos que muchos son más bien parideros piratas).
Al rescatar y adoptar un animal en situación de calle, o bien, adoptarlo de los albergues, estaremos colaborando, aunque sea con un granito de arena, con el bienestar de perros y gatos que lo pasan tremendamente mal en las calles del país.
Envío de energía limpia mediante la imposición de manos
Reiki es una técnica de sanación de origen japonés, pero que existe en todas las cultura antiguas, y que consistente en la transmisión de energía limpia y sanadora mediante la imposición de manos.
Al enviar y recibir esta energía limpia proveniente del cosmos (Energía Vital Universal) se ven beneficiados tanto el terapeuta como, desde luego, el paciente.
Esta técnica de sanación ayuda a eliminar o mejorar, entre otras cosas:
Estrés (de cualquier tipo), despresión, angustia, ansiedad, insomnio, falta de concentración, aminora efectos secundarios de cualquier medicamento, alivia síntomas de enfermedades, alivia secuelas de enfermedades, aporta claridad mental, eleva el sistema inmunológico, entre otros, lo cual es una gran ayuda en procesos de Covid, diabetes, cáncer, hipertensión, y cualquier otra enfermedad inmunodepresora.
El reiki se puede aplicar, desde luego, a todos los seres vivos y que emiten una energía: animales, plantas, cuerpos de agua, rocas, a toda la naturaleza. Incluso puede enviarse reiki a sucesos, hechos o eventos presentes, pasados o futuros: pasados para tratar de atenuar sus consecuencias, futuros para fortalecer los resultados positivos.
Como ves, es una técnica que tiene un sinfín de posibilidades en muchos planos: físicos, mental, emocional, espiritual, presente, pasado, futuro, humanos, animales, y la naturaleza toda.
Hay variantes de reiki dependiendo de cómo y dónde se aprendió. El más común y difundido es el Reiki Usui Tibetano, que consta de tres niveles y una maestría.
Azul Índigo imparte cursos de los diferentes niveles de Reiki Usui Tibetano, para favorecer el bienestar integral de las personas, animales, y su entorno.
El curso de Reiki nivel 1 se impartirá el 2 y 3 de octubre de 2021, en versión on line, así que está al alcance de cualquier persona en cualquier lugar del mundo. Anímate a introducirte en el fascinante mundo de la sanación energética y, con ello, del conocimiento amoroso de ti mismo y de los que te rodean.
Nuestra motivación es la compasión por todos los seres y el deseo para que todas las especies se comprendan mejor entre ellas, particularmente ayudar a restaurar la capacidad humana, hoy perdida, para comunicarse libre y directamente con otras especies.
Honramos a todos aquellos quienes buscan ayuda con nosotros, sin juzgarlos, condenarlos o invalidarlos por sus errores e incomprensión, sino honrándolos por su deseo de cambio y armonía.
Sabemos que para mantener este trabajo tan puro y armonioso como sea posible, se requiere que nosotros crezcamos espiritualmente de forma continua. Estamos conscientes de que la comunicación telepática puede verse nublada por nuestras emociones insatisfechas, juicios críticos o falta de amor por otros o por nosotros mismos.
Caminamos con humildad, con la intención de reconocer y enmendar nuestros errores en la comprensión de la comunicación con otros (humanos y no-humanos por igual). Cultivamos el conocimiento y la comprensión de las dinámicas del comportamiento de humanos, no-humanos y de las relaciones entre distintas especies, con el fin de incrementar los buenos resultados de nuestro trabajo.
Obtenemos la educación y/o ayuda personal para hacer nuestro trabajo con eficacia, compasión, gozo y armonía. Buscamos sacar lo mejor de cada quien y aumentar la comprensión para lograr una mutua resolución de los problemas. Vamos solo ahí donde hemos sido llamados a ayudar, de tal forma que las partes sean receptivas y realmente podamos ayudar. Respetamos los sentimientos e ideas de los otros y trabajamos por la comprensión entre las especies, sin sentir lástima por una parte en contra de la otra, sino sintiendo compasión por todos. Reconocemos las cosas que no podemos cambiar y continuamos donde nuestro trabajo puede ser más efectivo.
Respetamos la privacidad de la gente y de sus compañeros animales con quienes trabajamos, y honramos su deseo de confidencialidad. Mientras hacemos nuestro mejor esfuerzo por ayudar, atendemos a la dignidad de cada quien, y les ayudamos a ayudar a sus compañeros animales. Cultivamos la comprensión y la habilidad en los otros, más que la dependencia en nuestras propias habilidades. Ofrecemos formas en las que la gente puede involucrarse en la comprensión y crecimiento con sus compañeros de otras especies.
Penélope Smith y yo, durante mi preparación con ella en Prescott, Arizona, 2014.
Reconocemos nuestras limitaciones, buscando ayuda de otros profesionales cuando así lo necesitamos. No es nuestro trabajo detectar y curar enfermedades, y referimos a las personas a veterinarios que puedan hacerlo.
Podemos transmitir ideas de los animales, sentimientos, dolores o síntomas de acuerdo con lo que ellos describen o como las percibimos en nuestro cuerpo, lo que puede ser útil para los veterinarios. Podemos asistir a los consultantes en el manejo del estrés, como consejeros, y con otros métodos gentiles de curación. Dejamos que sean los consultantes quienes decidan cómo curar a los animales, una vez que cuenten con la información obtenida.
La meta de una consulta, charla, taller, o experiencia de comunicación intuitiva con animales es crear más compasión, balance, comprensión y comunión para todos los seres. Seguimos nuestro corazón, honrando el espíritu y la vida de todos los seres como parte de la Unidad.